Qué afortunado Conclave, libros gratis sería mi utopía, por ahora ni dinero tengo para comer. El transportarme hasta allá sale carito, ya que tenga auto lo llenaré solo los fines de semana para que la pague mi papá, jeje.
Manuel, prometo saludarte la próxima vez que te vea, pero de verdad tendré que vencer mi timidez crónica. Además, sabiendo que no llevas lentes, es tentador aprovecharse de tu discapacidad y huir.
Sigo sin hablarle a nadie, hace tanto que no me dedico a socializar (siempre un amigo me presenta a sus amigos y asi conozco gente) que creo ya se me olvido como se hace. Pero no hay problema, me encantan mis clases y tengo alma de ñoña, así que me acostumbraré.
Y los demás?